Céspedes

Nutrir, podar

¡En primavera, seguramente le parecerá que crece demasiado rápido! Pero qué delicia, luego, poder ver dejar pasar las horas relajadamente tumbado en el césped, durante una cálida tarde de verano…

El corte

il taglioCortar regularmente las briznas de césped aumenta la densidad y la homogeneidad de éste estimulando el desarrollo de los brotes laterales, lo cual favorece el "macollaje", es decir, el crecimiento a lo ancho de las matas.

Primavera y otoño. Un calor moderado (de 15ºC a 25ºC) y una correcta humedad favorecen el crecimiento del césped. De finales de marzo a principios del verano, y luego del 15 de septiembre a finales de octubre (más o menos 15 días en función de las regiones), corte el césped una o dos veces por semana entre 3 y 5 cm de altura, según el aspecto que desee. En primavera y a principios del otoño, dado que la humedad natural es a menudo importante, el césped crece tupido.
 

Mi consejo: en este período, recoja sistemáticamente la hierba cortada y compóstela o extiéndala, con un espesor de 7 a 10 cm, formando un acolchado en los macizos de arbustos y a lo largo de los setos.

En verano. Durante los períodos secos y cálidos, aumente la altura del corte (de 8 a 10 cm) para que el suelo conserve mejor su humedad. De hecho, las briznas de césped sombrean el suelo reduciendo su temperatura y, por tanto, la evaporación. Durante este período, realice el corte mulching. Éste consiste en obstruir el cárter del cortacésped para que la hoja triture finamente las briznas de hierba cortadas. Estas últimas se depositan por gravedad de manera invisible en el césped, formando una capa orgánica que reduce la evaporación en la superficie del suelo y le devuelve algunos elementos minerales. Con tiempo seco y cálido, el césped entra en dormancia y deja de crecer, lo que le permite resistir durante unas semanas a las condiciones climáticas desfavorables. No corte el césped en época de canícula. Tras varias horas de lluvia, el césped reverdece y recupera su crecimiento normal.

Mi consejo: para obtener la altura de césped ideal de manera sencilla y práctica, procure cortarlo de cada vez una tercera parte de su altura. De este modo evitará los cortes demasiado rasos, que dejan al desnudo el corazón de las matas, volviéndolas más sensibles a la sequía o a la invasión de las malas hierbas.

Es más ecológico. Al aumentar la altura del césped hasta 8/10 cm, consigue un aspecto un poco más rústico (menos homogeneidad), pero reduce por la mitad la frecuencia de corte (cada 10 ó 15 días). Los céspedes altos también detienen la invasión de los gusanos blancos cuyos adultos prefieren la hierba rasa para poner sus huevos.

Mi consejo: afile o cambie la hoja de su cortacésped al menos una vez al año. Un corte bien limpio de las briznas del césped reduce su sensibilidad a las enfermedades criptogámicas impidiendo que amarilleen.

El riego

Las gramíneas del césped desarrollan un sistema radicular fino y fibroso que representa aprox. un 70% de la masa total de la planta. Riegue el césped con una fina lluvia para que el agua se infiltre hasta una profundidad de 10 cm en el suelo y, beneficie por tanto, a todas las raíces. Riegue sistemáticamente tras un uso intensivo del césped (merienda, partido de fútbol, etc.)

Mi consejo: nunca riegue en pleno día ya que una gran parte del agua se despilfarrará por evaporación, pero también porque la frescura del agua de la traída crea un efecto de "ducha escocesa" que un césped recalentado por el sol no agradece nada.

Primavera y otoño. De principios de abril a principios de junio, y luego del 15 de septiembre hasta finales de octubre (temperatura media de 15ºC a 20ºC), 1 m2 de césped requiere de 3 a 5 l de agua por semana.

Mi consejo: en este período del año riegue al final de la tarde o a media mañana para que las briznas de césped se sequen rápidamente. Esto reduce los riesgos de enfermedades criptogámicas.

En verano. Del 10/15 de junio a mediados de septiembre, cuando la temperatura supere los 25ºC durante el día, riegue una de cada dos noches, no más. Hágalo al caer la noche para dar vigor a las matas de césped castigadas por el calor y permitir que el agua penetre profundamente. Un riego irregular obliga a las raíces a buscar agua a más profundidad.

Mi consejo: aunque el césped amarillee en época de canícula, lo que resulta casi inevitable, no riegue a diario ya que lo obligaría a desarrollar unas raíces superficiales y lo volvería aún más sensible a la sequía.

La fertilización

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Debido a la densidad de su follaje que representa una superficie considerable, y a su rapidez de crecimiento, el césped absorbe muchos nutrientes del suelo. Una fertilización adaptada y bien dosificada aumenta la densidad del césped, haciéndolo reverdecer y permitiéndole desarrollar un sistema radicular sólido, que le ayuda a tolerar mejor la sequía estival.

En abril, aplique un abono de tipo abono para césped de larga duración Aquacontrol justo después de un período de crecimiento (tiempo suave y húmedo) para favorecer el desarrollo radicular y no el del follaje.

Complete su programa de fertilización en septiembre con el abono para césped Tont’contol de Fertiligène, que permite reducir los cortes hasta en un 50% comparado con otros abonos para césped clásicos.

Opte por el abono órgano-mineral ya que la parte orgánica aporta los microorganismos necesarios para el suelo para que sus componentes minerales resulten asimilables por las plantas.

Mi consejo: opte por los abonos de liberación lenta que solo requieran una aplicación y no corran el riesgo de migrar a la profundidad del suelo. Distribuya el abono en la dosis indicada en el embalaje, preferentemente por un suelo húmedo.

El uso del rodillo

Este es uno de los secretos de belleza de los céspedes británicos. En el Reino Unido se utilizan cortacéspedes con un rodillo integrado que dejan esas bandas tan estéticas que pueden admirarse en algunos estadios. El uso del rodillofavorece el desarrollo de las matas de césped en espesor (macollaje).

Mi consejo: pase el rodillo una vez al mes, sobre todo durante los períodos húmedos. Al llenarlo de agua procure que no resulte demasiado pesado.